lunes, 8 de octubre de 2012

El Premio Nobel de Medicina que suspendió biología


John B. Gurdon.
En el despacho de John Gurdon, presidiendo su mesa, hay una nota enmarcada. No es el comunicado del Premio Nobel de Medicina, que ayer le concedieron junto a Shiniy Yamanaka, ni las notas sobre sus estudios celulares. 
Se trata de la nota que una profesora del colegio secundario privado Eton College, el más exclusivo del Reino Unido, escribió cuando sólo tenía 15 años.
"Creo que Gurdon tiene la idea de convertirse en científico. 
Por lo que muestra en este momento, esto es bastante ridículo. 
Si no puede entender datos biológicos simples, no tendría ninguna oportunidad de hacer el trabajo de un especialista y sería una absoluta pérdida de tiempo tanto para él como para los que le enseñen", sentenció la maestra cuando Gurdon tenía 15 años y apenas había completado el primer semestre en Eton.
Tan negro vieron su futuro sus padres que le dieron dos opciones: la carrera militar o el mundo de las finanzas. Ninguna de las dos cuajó. 
La primera porque no le admitieron en el Ejército y la segunda simplemente porque no.
En un intento por dar un giro radical a su vida, Gurdon, en contra de lo que querían sus padres, optó por estudiar clásicos -Latín y Griego- en el colegio Christ Church, de la Universidad de Oxford, pero después se pasó a la zoología.
Su entrada en zoología fue casi por casualidad, después de recibir una carta del jefe del Departamento de admisiones de Oxford, Hugh Trevor-Roper, en la que le proponía hacer el cambio si aceptaba inmediatamente dejar los clásicos por la ciencia.
A diferencia de lo que es hoy la Universidad de Oxford, en la que hay gran competencia por las plazas, la ciencia no era en tiempos de Gurdon muy requerida y había dificultades para reclutar alumnos.
Con este cambio, John Gurdon empezó una carrera meteórica que le ha convertido en uno de los científicos británicos más famosos, en concreto por haber transferido núcleos de células epiteliales del intestino del renacuajo a huevos de sapo.
Junto al japonés Shinya Yamanaka, Gurdon fue premiado hoy por haber descubierto cómo se pueden "reprogramar" las células maduras para que se "conviertan en células pluripotentes", capaces de transformarse en cualquier tipo de tejido, lo que "ha revolucionado" la comprensión de cómo se desarrollan las células y los organismos.
elmundo.es

sábado, 23 de junio de 2012

La ciencia y la tecnología conmemora a Alan Turing, padre de la informática


Google cambia su logo por una 'máquina de Turing' para celebrar el aniversario.
La comunidad científica y tecnológica conmemora el centenario del amado padre de la computación moderna, el genio matemático británico Alan Turing, cuyos decisivos trabajos de descodificación de mensajesfueron claves para vencer a la alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
El 23 de junio se celebra el centenario de su nacimiento en Londres, y muchas ciudades han organizado conferencias y exposiciones para rendir homenaje a la labor de un hombre considerado un auténtico genio de las matemáticas, pero que fue perseguido durante toda su vida por su homosexualidad.
"Turing es probablemente la única persona que ha hecho contribuciones que han cambiado el mundo en los tres tipos de inteligencia: la del ser humano, la artificial y la militar", afirmaba en un editorioal reciente la revista prestigiosa científica Nature.
Turing murió a la edad de 41 años, envenenado con cianuro (hay dudas sobre si se suicidó realmente, como comunmente se afirmaba hasta ahora), tras ser declarado culpable en 1952 por "indecencia grave" debido a su homosexualidad -ilegal en el Reino Unido en ese momento- y ser sometido castración forzada química. 
Hay que destacar que el gobierno británico no pidió explícitamente perdón por el trato cruel, discriminatorio e "inhumano" que recibió el científico hasta nada menos que 2009.
Estatua en recuerdo de Turing en Sackville Park, Manchester
Algunos creen que el científico, conocido por su excentricidad, se suicidó en 1954 al comer una manzana envenenada, pero nunca se pudo probar. 
En cualquier caso, el monumento dedicado a él cerca de la Universidad de Manchester le representa en un banco y con una manzana en la mano.
Poseedor de una privilegiada intuición, Turing sentó las bases de la computación moderna y los criterios para la inteligencia artificial, además de ser conocido sobre todo por romper los códigos utilizados por el ejército alemán y su máquina codificadora Enigma, algo que salvó millones de vidas al acortar la II Guerra Mundial.
Pero su trabajo va más allá. En 1936, Turing, que había anunciado planes para "construir un cerebro", publicó un artículo describiendo la "máquina universal de Turing"; 
Fue el primero en considerar la posibilidad de programar una máquina mediante 'datos' de modo que puedan llevar a cabo otras tareas al mismo tiempo, al igual que los ordenadores de hoy en día.
De hecho, Google cambia su logotipo hoy, a modo de homenaje, con un espectacular 'doodle' que emula precisamente esa 'maquina de Turing' que planteó de forma teórica.
Cuando fue construida finalmente por otros científicos en 1950, la primera versión del motor de Computación Automática (ACE) de Turing fue la máqina computadora más rápida del mundo.
Marietta Le Roux (Afp) 
elmundo.es